Hay un lugar en Francia, idealmente situado en la costa atlántica a 50 km de Nantes, donde puede tomarse su tiempo para afinar su swing, rodeado de pinos, calas rocosas y villas de la Belle Epoque. El Golf de Pornic, uno de los más antiguos de Francia , es uno de esos lugares donde respirar hondo y disfrutar en un recorrido centenario de 18 hoyos. Encontrará el mismo ambiente agradable que ha hecho famoso al Slow Village Pornic.Hotel al aire libre Slow Village PornicEs un modo de vida sencillo y sincero, donde el juego se convierte en un pretexto para la contemplación, la reconexión y el placer de vivir la vida plenamente, sin que se agote el tiempo.
Diseñado tanto por el placer del juego como por la belleza del lugar, el campo de golf de Pornic le invita a descubrirlo en tres etapas: entre la historia, el relieve natural y un ambiente único que mezcla bosque y brisa marina, al ritmo tranquilo de la costa atlántica.
El campo de golf de Pornic es ante todo una firma. La de un recorrido de 18 hoyos (par 72 - 6082 metros) modelado por más de un siglo de historia y la mano experta del arquitecto Michel Gayon. No se trata sólo de un campo de golf, sino de un terreno de juego vivo, esculpido entre pinares centenarios y vistas abiertas, donde cada hoyo parece corresponder al relieve natural de la región Loira-Atlántico.
Este club histórico, fundado en 1912, es uno de los campos de golf más antiguos de Francia, y eso se nota en cada curva. Aquí podrá disfrutar de una sutil alternancia entre maleza y calles anchas y onduladas, entre golpes técnicos y momentos de contemplación. Los greens bien defendidos y los arroyos aportan la dosis justa de frescura y desafío para deleitar a golfistas de todos los niveles.
Jugar al golf en Pornic también es dejarse sorprender por la luz de la costa atlántica que se filtra entre los pinos, el canto de los pájaros al amanecer y esa rara sensación de estar aislado del mundo pero a la vez a poca distancia de la ciudad. Este recorrido de tamaño humano es a la vez exigente y relajante, y podrá avanzar a su ritmo, llevado por el placer del juego y la belleza del lugar.
En el Golf de Pornic, todo está pensado para que cada uno pueda disfrutar del golf a su ritmo, sin presiones y sin cronómetro. Ya se trate de una sesión deiniciación o de perfeccionamiento, o simplemente del deseo de compartir una partida con amigos, la experiencia es fluida y accesible, y el ambiente siempre acogedor.
Las clases y los cursos, abiertos a todos los niveles, están supervisados por un equipo que escucha a cada jugador y le guía a su ritmo, en un ambiente agradable. Aquí no hay fórmulas rígidas: sólo el placer de aprender en plena naturaleza, rodeado de pinos centenarios y del murmullo del océano cercano.
El campo de prácticas ofrece un lugar ideal para calentar o perfeccionar sus golpes, con 20 estaciones, 5 de las cuales están equipadas con la tecnología TopTracer. No hay estrés, sólo el placer de ver volar la bola, observar tus progresos o dejarte llevar por la calma del lugar.
Zonas de approach, búnkeres de prácticas, putting green, campo de prácticas de hierba o minigolf de 18 hoyos: las instalaciones son variadas, están bien integradas en el paisaje y abiertas a todos, jóvenes y mayores. Y para los que viajan ligeros de equipaje, todo se puede alquilar in situ: palos, buggies, material... sólo hay que llegar con las manos en los bolsillos y las ganas de jugar en la bolsa.
La proshop completa la experiencia con una selección de equipos y accesorios, a la vez prácticos y elegantes. Es la forma perfecta de prolongar el momento y llevarse a casa un recuerdo del lugar.
El campo de golf de Pornic también domina el arte del entretenimiento. Se vienea jugar al golf, por supuesto, pero se queda por el ambiente. Aquí, cada servicio ofrecido está pensado para prolongar el placer, crear vínculos o simplemente saborear el momento en un marco acogedor, en plena naturaleza.
Después de un partido o simplemente por el placer de relajarse, el restaurante del club es una auténtica invitación a desconectar. La cocina es tradicional, generosa y sincera, con un menú diario que cambia con las estaciones. En el comedor o en la terraza con vistas al green, el ambiente es sencillo y cálido. Un bar y un snack bar están también a su disposición para un aperitivo rápido o una pausa improvisada.
El campo de golf de Pornic es también un lugar donde organizar reuniones, seminarios o eventos privados en un entorno natural relajante, propicio para la concentración y la creatividad. Lejos del bullicio, pero bien comunicada, la casa club dispone de Wi-Fi, aparcamiento y un ambiente acogedor.
De acuerdo con el espíritu de los hoteles al aire libre Slow Village, aquí todo se hace para que todos se sientan bienvenidos. Empezando por la accesibilidad del recorrido, que acoge a personas con discapacidad y no olvida a sus amigos de cuatro patas con correa. Todo el recinto permanece abierto y agradable para jugar, tanto si viene solo, en pareja, en familia o en equipo. Esta atención a las necesidades individuales hace del golf de Pornic un lugar especial, donde el compartir, la convivencia y la humanidad están en el centro de la experiencia deportiva.
Tanto si es un golfista habitual como si simplemente siente curiosidad por descubrir este lugar tan especial, tenemos todo lo que necesita para que su visita al Club de Golf Pornic sea lo menos estresante posible. Aquí tiene lo esencial para ayudarle a preparar su visita:
¿Y si su partida de golf no acabara en el hoyo 18? A dos pasos del campo de golf de Pornic, los hoteles al aire libre Slow Village le invitan a prolongar la experiencia en un marco que habla el mismo idioma: el de la naturaleza, la sencillez y el tiempo recobrado.
Tras una mañana en los greens, sólo hay unos minutos hasta su alojamiento, idealmente situado entre el pinar y la brisa marina. Aquí no hay desconexión brusca: sólo una suave continuidad entre el ritmo del campo y el de un baño de sol al final del día, una cena bajo las estrellas o un paseo descalzo por los senderos.
Este vínculo único entre el golf y el turismo slow, raro y precioso, hace de Pornic un destino completo, donde podrá perfeccionar su swing así como reencontrarse consigo mismo. Sólo le queda aprovechar al máximo unas vacaciones que equilibran el ímpetu deportivo y los momentos de suspensión, en un entorno tan animado como rejuvenecedor.
Mezcla de naturaleza, deporte y estilo de vida, el campo de golf de Pornic es una verdadera prolongación del espíritu Slow Village, hasta en los greens. Es el medio ideal para reencontrarse con uno mismo, al ritmo del viento y de las estaciones. ¿Por qué no venir a disfrutar del lujo discreto de tomarse su tiempo?
Un paseo en barco hasta Pornic le llevará a través de la historia de una región bretona que cultiva el arte del momento, con sus calas plateadas, sus acantilados bañados por el mar y sus puertos llenos de casitas de pescadores de colores.
Durante su estancia en Slow Village Pornic, recorra el sendero de los Douaniers y déjese seducir por la belleza salvaje de la costa atlántica para una inmersión única en el corazón del litoral.
Zarpe de Pornic y alquile un barco para descubrir la costa de una forma totalmente nueva, con sus calas escondidas y sus impresionantes paisajes marinos.
¡Descubra Pornic de una forma diferente con el alquiler de bicicletas! Entre playas, senderos costeros y paisajes marinos, explora la región a tu ritmo para una escapada llena de libertad.
¿Sueña con una inolvidable escapada junto al mar? Déjese seducir por Pornic, la joya de la corona de la Côte de Jade, en la región del Loira Atlántico, una agradable localidad donde podrá tomarse su tiempo para relajarse y desconectar.
Los mercados de los alrededores de Pornic son un lugar de visita obligada para buscar productos frescos, artesanía local y un ambiente acogedor durante sus vacaciones.
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